MEXICO, DF, 4 de julio (apro).- Organizaciones internacionales de defensa de la libertad de expresión demandaron al candidato del PRI, Enrique Peña Nieto, virtual ganador de la contienda presidencial, un compromiso serio que ponga fin a la violencia contra los periodistas mexicanos.
En un comunicado, la Asociación Mundial de Periódicos y Editores y Editores de Noticias (WAN-IFRA, por sus siglas en inglés) y el Instituto Internacional de Prensa (IPI), agrupaciones radicadas en Europa, instaron a Peña Nieto a “garantizar la seguridad de los periodistas y ponga fin a la violencia y el acoso a los que éstos se enfrentan en todo el país”.
En el documento, se informa que el año pasado el IPI clasificó a México como “el país más peligroso del mundo para los profesionales de los medios”, al registrarse 12 asesinatos de comunicadores.
En el informe de IPI, denominado Death watch, se revela que “desde que el gobierno federal (de Felipe Calderón) declarara la guerra a los cárteles de la droga en 2006, han muerto de forma violenta 57 periodistas, más del doble que en el periodo 1997-2005”
Luego de los primeros discursos de Peña Nieto, pasados los comicios, en los que prometió combatir la criminalidad generalizada, WAN-IFRA e IPI pidieron extender el compromiso a la defensa de la libertad de expresión,
El subdirector del IPI, Anthony Mills, valoró como positivas las declaraciones de Peña por los “desafíos que supone abordar el nivel de violencia extrema que padecen numerosas ciudades mexicanas”.
En el comunicado, se destaca que Mills hizo un llamado “a que el fin de la violencia contra los periodistas se convierta en una de las prioridades de su administración, ya que tiene consecuencias serias y duraderas en toda la población mexicana”.
La directora de Libertad de Prensa de WAN-IFRA, Alison Meston, resaltó que para hacer realidad la promesa de Peña Nieto de garantizar la democracia, las libertades y la transparencia, “sólo será posible si se pone fin a la impunidad y la violencia que están actualmente afectando la labor de la prensa mexicana en todo el país”.
En su comunicado, ambas organizaciones hacen referencia a recientes casos de violencia contra representantes de los medios: el asesinato en la Ciudad de México de Armando Montano, pasante de Associated Press (AP), el 30 de junio; la agresión a Rafael Said Hernández, director de la revista Tucán de Oaxaca, el 24 del mismo mes, y la desaparición el 21 de mayo en Nuevo Laredo, Tamaulipas, del periodista mexicano-estadunidense Zoe Alejandro Plemnons Rosales.
Las ONG retoman parte de la resolución de la asamblea general anual de IPI realizada el 25 de junio en Puerto España, Trinidad y Tobago, en donde se exige al gobierno de Felipe Calderón proteger “a los periodistas y acabar con la impunidad que ampara a sus asesinos”.
El texto aprobado en la asamblea resalta que “mientras la violencia aumenta y la corrupción del gobierno persiste nivel municipal y estatal, los periodistas mexicanos corren más peligros que nunca”.
Después de reconocer “la complejidad del desafío que supone la seguridad pública”, el resolutivo añade que “temiendo por su seguridad, cada vez más periodistas y empresas de medios dejan de informar sobre los cárteles de la droga y el crimen organizado. Esta autocensura limita seriamente el derecho de los ciudadanos mexicanos a ser informados sobre cuestiones de relevancia pública y atenta con ello contra la misma democracia”.